
Inseguridad. Frialdad. Irritación. Desconfianza. Indignación. Miedo. Melancolía. Varios eran los sentimientos que le abordaban en aquellos momentos. No sabía cómo había pasado pero aquello se había torcido, algo era diferente, y eso le hacía ponerse muy nerviosa.
- Ya no me miras como antes.
- ¡Qué dices mujer! ¡ No digas tonterias!
- No es una tontería.
- ¿Y cómo te miraba antes, si se puede saber?
- Pues de otra manera. Con ternura, me mirabas lentamente, muy fijamente a los ojos mientras me acariciabas la cara con mucha delicadeza y hablabas despacito, con esa voz aterciopelada que pone un quinceañero enamorado. Durante ese segundo parecía que el tiempo se detenía, la tierra dejaba de girar para nosotros dos y yo no podía aguantarte la mirada y bajaba la cabeza; era tan profunda, tan limpia. Me sonrojabas, hacias que mis piernas temblasen. Me hacias sentir grande, una pieza valiosa de tu vida.
- ¿Y en qué has notado eso?La verdad, eres una excéntrica. Te comes la cabeza con cualqier cosa. Deja de atormentarte por esas historias que te montas, gilipolleces.
- No son gilipolleces, te estoy hablando muy enserio. ¿Y sabes qué? Me estoy cansando.
- ¿De qué?
- De ver esa mirada, día a día.
- Te contradices. ¡Mujer me vas a volver loco!
- La veo constantemente... pero no dirigida hacia mi.
- La verdad, no estoy ahora para tus comeduras de cabeza, vamos a acabar discutiendo y no me apetece.
- A la que le está dejando de apetecer esto ya es a mi... Además, no me has negado lo que te acabo de decir.
- ... - mira hacia otro lado mientras entorna los ojos y da un bufido.
- El silencio es la forma más elocuente de mentir... o de delatarse.
- ¡María venga ya! ¿Dejalo vale? ¡Dejalo! ¿Qué quieres conseguir con esto? ¿A dónde quieres llegar? Venga di.
- Creo que está ya todo dicho. Adiós Manuel, cuidate.
Celia Hernández
2 comentarios:
Ala :O Me ha encantado :) Besos <3
No es excéntrica, pienso que solo está DEMASIADO enamorada.
Espero que no te moleste que te siga (:
Un beso de esquimal
Publicar un comentario