domingo, 25 de octubre de 2009

Miro a mi alrededor

Típicos domingos que te ayudan a organizar ideas.Añadir vídeo
Pensar, hacer algo de probecho quizás.

Miro a mi alrededor y veo que todo se va alineando poco a poco.
Porque no todo siempre va a estar mal, ni bien, pero por lo menos todo
guarda un equilibrio entre ambos conceptos.

Miro a mi alrededor y veo que surgen nuevos objetivos,
me gusta ver a aquellas peronas que comparten mi vida con esperanzas de futuro.
Les van surgiendo nuevas espectativas, nuevos planes, sientiendo cosas nuevas, conociendo
gente nueva, nuevos sentimientos.





¿Qué le pedimos a la vida?

Depende de cada persona.

Algunos le piden éxito, fortuna, respeto.

Otros van malviviendo como pueden, luchando con todo lo que se les pone por delante, cuando alomejor todo les iría mejor si usasen más la palabra: humildad, y menos la prepotencia.

Otros se conforman con lo que tienen. Son realistas dicen.
Han aprendido a resignarse con lo que creen que les ha tocado vivir. No salir, mirar todo desde la barrera. Dejar que la marea les lleve.

Y luego hay otros que luchan, luchan con todas sur fuerzas por tener algo mejor. Saben que se lo merecen, y no piensan conformarse con menos. Y aunque no todo lo que se propongan lo consigan, al menos se quedan cerca de ello, se sienten bien.

Otros que simplemente viven y dejan vivir. Solo le piden a la vida salud, autorrealización, encontrar su camino.


Yo solo le pido que me deje disfrutar de todo lo que está por venir.
Le pido tiempo.

Tiempo para luchar,
para llorar pérdidas,
para amar, para sufrir, para gritar,
para corrrer, para sentir miedo, inseguridad, indecisión, felicidad, AMAR.

Porque no puedes luchar contra ese instinto básico que todos tenemos: el amor.

Eso que es difícil de descubir, pero fácil de sentir, demasiado fácil.





Algo que puede resultar terriblemente encantador pero también te puede producir el peor de los dolores, ese que no es físico, ojala solo fuese dolor físico.

Tiempo para descubrir, crecer, aprender, observar, no mirar, OBSERVAR lo que te rodea, y apreciarlo.




"Parece haber algun tipo de orden en el universo. En el movimiento de las estrellas y el giro de la Tierra y el cambio de las estaciones. Pero la vida de los humanos es casi un puro caos. Cada unos toma su postura, afirma su verdad y sus sentimientos. Equivocando los motivos de los otros y el suyo propio".




Celia Hernández.

domingo, 4 de octubre de 2009

¡Bah! Puedo permitirmelo.


Domingo...Sunday...
Anochece en Cáceres capital...
Hay una buena temperatura en el ambiente, demasiado calurosa quizás
para estar ya en otoño y en pleno mes de Octubre.

Una sensación de cansancio me invade completamente.
Conclusión de este fin de semana: agotador y bastante entretenido.
Despues de darme esa ducha que tanto necesitaba noto como poco a poco empieza a notarse los efectos de lo poco que he dormido esta noche, y de lo vaga que estoy...
Porque otra cosa no habré hecho, pero vaguear, he vagueado como nunca.
¡Bah! Me lo puedo permitir.

Incluso sabiendo que se aproxima un examen en el que hay muchas posibilidades que suspenda,
y si encima no te lo preparas como te lo tendrias que haber preparado, ya la cosa está clara.
Pero bueno, me lo puedo permitir.
Supongo...
Sino...ya da igual, es demasiado tarde para arrepentimientos.

Mañana empezará una nueva semana, semana en la que aprobecharé para hacer todo lo que no he hecho este finde. O más me vale.

Todo empezó con una petición el viernes:
- Celia, te informo de que este finde estaré sola. Mis padres se van. No me apetece star sola, vente anda.

Y claro, no voy a dejar a una amiga tirada, viviendo sola un fin de semana entero, y menos si nuestras casas están a menos de 30m de distancia aproximadamente...

Casa sola. Una nevera con comida por hacer, porque claro, su madre no le ha dejado nada preparado, y dos chicas muy poco familiarizadas con la palabra cocinar...Pero con un gran ingenio. Hemos logrado alimentarnos adecuadamente. Y he descubierto la sensación de autorrealización que se siente al comerte tu propia comida, esa que has preparado TU, que casi se TE quema, y que al final, TU te comes, con la sensación de que es el filete más rico que has comido nunca. Aun sabiendo que está seco y un poco soso. Te autoengañas... y lo sabes... Pero ¡bah! Te lo puedes permitir! Al fin y al cabo, es tu primer filete.

despues de comer te ayudo a recoger y me voy a mi casa.
Sí, ahí es cuando descubres la rozón que tienen algunos refranes:
"Del dicho al hecho, hay un trecho."

Porque no, no te vas, al revés, te quedas. Y encima ni recoges la mesa ni nada.
Te tiras en el sofá con el portatil y a "ver" GH...
Vaguear, vaguear, vaguear...
Sales hasta tarde, no duermes lo suficiente...

He hecho todo y a la vez no he hecho nada.
Pero bah! No pasa nada.
Porque yo, ¡YO me lo puedes permitir!

Habia que aprobechar este finde, y yo, creo que lo he hecho,
que es lo importante...
Ya vendrán mañanas las preocupaciones.


:)




Celia Hernández.